El exmandatario estadounidense y candidato republicano Donald Trump arremetió contra la vicepresidenta, Kamala Harris, a través de una serie de publicaciones en su red Truth Social, mientras esta pronunciaba el discurso para aceptar la candidatura demócrata a la Casa Blanca. Trump realizó en total 48 posteos, algunas veces incluso burlándose de la forma de hablar de Harris, durante el esperado discurso de la candidata demócrata. Inmediatamente después llamó a Fox News para acusar a Harris de haber permitido una «invasión total» en la frontera y la definió como una «marxista de fronteras abiertas».
«¿Demasiados ‘gracias’ dichos muy rápidamente, qué le pasa?», se burló Trump cuando empezó su intervención Harris, a quien se refirió como «Camarada Kamala». En el momento en el que la vicepresidenta empezó a atacar a Trump en su discurso, retratando al expresidente como un peligro para la democracia estadounidense y un hombre «poco serio» que traería consecuencias «serias» para el país, él escribió en mayúsculas: «¿ESTÁ HABLANDO DE MÍ?».
Trump se centró en Harris, a quien llamó repetidamente «marxista» y escribió: «¿Por qué no hace algo sobre las cosas de las que se queja?». «No habrá futuro bajo el mando de la camarada Kamala Harris , porque nos llevará a una Tercera Guerra Mundial Nuclear. ¡Los tiranos del mundo nunca la respetarán!», expresó Trump. Minutos después de que Harris concluyera su discurso, el magnate republicano intervino en la cadena conservadora Fox para seguir cargando contra la vicepresidenta.
«Va a dejar las fronteras abiertas»
En Fox Trump volvió a usar la crisis migratoria para atacar a Harris. «Está vaciando sus cárceles en Estados Unidos debido a su incompetencia y sus malas políticas fronterizas. Es una persona horrible, horrible para dirigir este país. No tendremos país si sale elegida», dijo Trump, asegurando que durante estos años se registró la entrada de «un número récord de terroristas».
Según el candidato republicano, alrededor de 20 millones de personas cruzaron a través de la frontera sur, «muchos de ellos» procedentes de «cárceles, instituciones mentales y manicomios», a medida que «otros países están liberando a sus presos de sus cárceles». En ese sentido destacó que durante su mandato Estados Unidos tuvo la frontera más segura de su historia y muestra de ello, según destacó, es el apoyo que recibió desde entonces de casi todos los cuerpos policiales del país.
Este viernes en un acto de campaña en Las Vegas, estado de Nevada, Trump dedicó su intervención a su propuesta de eliminar el impuesto a la propina. «Si eres un trabajador de restaurante, camarero, empleado de hotel, barbero, trabajas en mudanzas, conductor, o cualquier otra persona que dependa de las propinas, cuando gane este noviembre, vamos a permitir que te quedes con el 100 por ciento de tus propinas», afirmó Trump. En el escenario la campaña había instalado mensajes en inglés y en español, dirigiéndose al 20 por ciento de latinos que componen el electorado de Nevada, claves a la hora de decidir el resultado en este estado crucial.
En la recta final
Harris hizo historia este jueves al convertirse en la primera mujer afroamericana y la primera persona de origen sudasiático en ser nominada a la presidencia por uno de los grandes partidos de Estados Unidos. A menos de tres semanas de un esperado debate entre la vicepresidenta demócrata y el expresidente republicano (y a solo un mes de que empìece la votación anticipada), los sondeos muestran que la batalla por la Casa Blanca está reñida.
Harris sale de la Convención Nacional Demócrata celebrada esta semana en Chicago con viento a favor. Supera a Trump en las encuestas, borrando la ventaja que mostraba el republicano antes de que ella sustituyera hace un mes al presidente Joe Biden como candidata demócrata. Harris aceptó la nominación presidencial de su partido en una deslumbrante última noche en Chicago, arropada por una constelación de celebridades, que preparó el terreno para un agotador sprint final hacia los comicios.
En apenas un mes Harris logró revitalizar a su partido y captar donaciones récord para su campaña de 500 millones de dólares. Su campaña recibió otro impulso potencial cuando el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, dijo que había llegado el momento de un recorte de las tasas de interés, algo que reducirá los costos hipotecarios y otras presiones inflacionarias para los votantes. Los posibles obstáculos para Harris provienen de tensiones internas en el partido sobre la política estadounidense en relación a la Franja de Gaza y el retiro de Robert F. Kennedy Jr de la contienda.
Si Harris consigue mantener el impulso de estas dos primeras semanas de campaña y gana en estados claves como Pensilvania, la californiana, hija de una india y un jamaicano, hará historia. Pesos pesados demócratas como Michelle Obama y Bill Clinton o el compañero de fórmula de Harris, Tim Walz, advierten que el partido podría perder frente a los republicanos de Trump si cae en triunfalismos.
Trump estuvo en gran medida tratando de movilizar a su base conservadora con advertencias apocalípticas sobre los «migrantes criminales» y pintando un panorama oscuro de un país en decadencia que solo él puede salvar. En la otra vereda Harris y los demócratas buscan acercarse al centro. Mientras que antes caracterizaban a Trump como un demagogo, los demócratas empezaron ahora a burlarse del candidato republicano de una manera diseñada para hacer mella en su aura de invencibilidad.
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